Dicen que en esta vida todos tenemos una estrella al nacer. Otros dicen que es uno mismo quien se va marcando su destino con sus actos del pasado.
La verdad es que no se con cual quedarme. Pero si pienso que cuando naces algo te va marcando y bien porque cuando tienes que elegir un camino, de los tantos que se te dividen en tu vida, lo haces siendo joven sin saber lo que puede repercutir en tu futuro.
Alguien me ha repetido muchas ves en estos años de mi vida, que siempre hay un porque del hacer, del decir, del callar, etc... Yo siempre le contestaba que no era cierto. Que había veces que se decían las cosas o se hacían porque si. Sin haber realmente una razón. Como el que pasa por una tienda ve unas flores y las compra sin más para esa persona que le ha venido a la mente. Lo haces sin más.
Se que en esta vida me he equivocado en muchas ocasiones, aunque realmente tengo la sensación de que siempre. Menos en dos ocasiones (y esas me las guardo para mi).
La vida es cruel. O somos nosotros quienes la hacemos así. Una vida puede ser toda llana y plana. Puede ser con altibajos, con subidas a una montaña y bajadas. Subidas complicada que si las haces en compañía y pides la ayuda sincera, cuando la necesitas y sabes que la vas tener y no te fallará. Sabes que llegarás a la cima y la bajada será mas llevadera. Y tranquila.
Pero si subiendo esa cima y no eres sincera y la subes sin pedir auxilio, cuanto tomes la cima, estarás tan cansada que lo único que te saldrán será repoches. Y la bajada será dificil y peligrosa.
Pero en esta vida, sin estrella o con estrella marcada al nacer, tus decisiones desde la niñez es la que te marcará todo el resto de tu vida. Y saber retificar a tiempo y con buenas palabras y buenas intenciones será lo que te marque el resto de tu vida.
La verdad es que no se con cual quedarme. Pero si pienso que cuando naces algo te va marcando y bien porque cuando tienes que elegir un camino, de los tantos que se te dividen en tu vida, lo haces siendo joven sin saber lo que puede repercutir en tu futuro.
Alguien me ha repetido muchas ves en estos años de mi vida, que siempre hay un porque del hacer, del decir, del callar, etc... Yo siempre le contestaba que no era cierto. Que había veces que se decían las cosas o se hacían porque si. Sin haber realmente una razón. Como el que pasa por una tienda ve unas flores y las compra sin más para esa persona que le ha venido a la mente. Lo haces sin más.
Se que en esta vida me he equivocado en muchas ocasiones, aunque realmente tengo la sensación de que siempre. Menos en dos ocasiones (y esas me las guardo para mi).
La vida es cruel. O somos nosotros quienes la hacemos así. Una vida puede ser toda llana y plana. Puede ser con altibajos, con subidas a una montaña y bajadas. Subidas complicada que si las haces en compañía y pides la ayuda sincera, cuando la necesitas y sabes que la vas tener y no te fallará. Sabes que llegarás a la cima y la bajada será mas llevadera. Y tranquila.
Pero si subiendo esa cima y no eres sincera y la subes sin pedir auxilio, cuanto tomes la cima, estarás tan cansada que lo único que te saldrán será repoches. Y la bajada será dificil y peligrosa.
Pero en esta vida, sin estrella o con estrella marcada al nacer, tus decisiones desde la niñez es la que te marcará todo el resto de tu vida. Y saber retificar a tiempo y con buenas palabras y buenas intenciones será lo que te marque el resto de tu vida.
0:10 |
Category: |
0
comentarios
Comments (0)